Dos palomas blancas a que fueron liberadas por niños que estaban a un lado del papa Francisco en un gesto de paz fueron atacadas el domingo por otras aves. Ante la vista de miles de personas reunidas en la plaza de San Pedro, una gaviota y un cuervo negro grande se abalanzaron contra las palomas apenas fueron liberadas desde una ventana del Palacio Apostólico. Una paloma perdió algunas plumas cuando logró soltarse de la gaviota. Sin embargo, el cuervo picoteo repetidamente a la otra paloma. Se desconoce la suerte final de las palomas que lograron escapar volando. Momentos antes, desde la ventana del Palacio Apostólico, Francisco había hecho un llamado a favor de la paz en Ucrania, donde han muerto manifestantes antigubernamentales. Francisco dijo que oraba por Ucrania, en especial por aquellos que han perdido la vida en los últimos días.
El Papa y los niños saludan desde el balcón de los apartamentos papales del Vaticano. El momento en que los niños sueltan las palomas.
Las palomas se alejan del balcón, sin sospechar que tendrán que vérselas pronto con otros dos pájaros que no tienen muy buenas intenciones.
La primera de las palomas se las tuvo que ver con una gaviota. La gaviota fue persistente en su ataque y trató de acorralar a la paloma.
Otro momento de la lucha que libraron los dos pájaros tras la exhortación papal a la paz. El episodio duró unos minutos y fue captado por los fotógrafos congregados en el Vaticano para cubrir el Ángelus.
La otra paloma no corrió mejor suerte que su compañera, y le tocó huir de un cuervo que no tenía buenas intenciones.
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